Elio Cruz fanático hincha Sportivo, estuvo alentando a su gente.
Una grata sorpresa generó en redes sociales, ver al querido Padre Elio Cruz fanático hincha de River Plate alentando al Sportivo Pocitos en la final.
Un sacerdote asistiendo a ver a su equipo en la final es un ejemplo conmovedor de cómo las pasiones deportivas pueden unir a las personas en cualquier ámbito, incluso a líderes religiosos. Este tipo de eventos suele demostrar la universalidad del deporte como una actividad que trasciende las barreras sociales, culturales o incluso religiosas. La presencia de un sacerdote en la final podría simbolizar tanto el apoyo al equipo como un recordatorio de los valores de respeto, unidad y juego limpio.
La historia del sacerdote Elio Cruz de Salvador Mazza asistiendo a alentar a Sportivo en la final, aunque el equipo no haya logrado ganar, es una muestra del vínculo emocional y el compromiso que las comunidades tienen con el deporte. Este tipo de gestos, donde figuras como un sacerdote comparten momentos tan significativos, suelen fortalecer los lazos entre la comunidad y los equipos locales.
Elio Cruz, aunque ha entregado su vida a la espiritualidad y a la orientación pastoral de quienes lo rodean, no ha dejado de lado su amor por el fútbol. En su tiempo libre, sigue siendo un ferviente seguidor de este deporte , a través de la diversión y el deporte, transmite valores cristianos esenciales como la humildad, el respeto y la fraternidad.
La capacidad de Elio para combinar su rol como sacerdote con su amor por el fútbol refleja la importancia de encontrar equilibrio en la vida. “El fútbol conecta con el alma de las personas.
El Padre Elio muy querido y recordado en Gral Mosconi nos dedico unas palabras reflexivas despues del encuentro.
"Aunque no ganamos pero ganamos lo más importante la esperanza y los sueños de todo una comunidad que nunca baja los brazos. Sobre todo la ilusión y la alegría de ver a tanta gente que supo aceptar la derrota con responsabilidad".
Los valores de sacrificio y trabajo en equipo que enseña el deporte son los mismos que trato de compartir desde el púlpito”, afirma con convicción. Además, Elio opermanentemente vive involucrado en las actividades e invita a jóvenes y adultos a reflexionar sobre valores espirituales mientras disfrutan y a través de su vocación y su pasión por el fútbol, Elio Cruz ha logrado transmitir enseñanzas que abren espacios de conexión, mostrando que los caminos de la espiritualidad y el deporte pueden complementarse de manera profunda.
Aunque la derrota puede ser dura, seguro que la presencia del Padre Cruz brindó apoyo y motivación a los jugadores y a los hinchas, recordando que en el fútbol, como en la vida, se celebran tanto los triunfos como el esfuerzo y la unión que surge en estos eventos. Otra vez será querido Elio Cruz.